En Piura existen dos centros artesanales muy importantes por la calidad de sus trabajos y tradición que estos pueblos cultivan de generación en generación.
Catacaos, es considerada como la capital artesanal de Piura y Chulucanas muy conocida por los finos trabajos de su cerámica de barro que han dado la vuelta al mundo conquistando mercados extranjeros.
Catacaos este pintoresco pueblo se encuentra a 12 km. de la ciudad de Piura, su raíz se encuentra principalmente en la cultura Tallán y se caracteriza por la producción de algodón, de gran calidad por su textura y largas fibras, es sumamente cotizada tanto en el país como en el extranjero.
Algo muy característico de Catacaos es la habilidad innata de sus artesanos que hacen maravillas de oro y plata, así como también de paja, madera, cuero, barro y prendas codiciadas por los cientos de turistas nacionales y extranjeros que llegan a estas soleadas tierras.
Catacaos presenta a todos los turistas su histórica y bella calle Comercio, arteria principal cuya antigüedad de dos siglos ha recibido a miles de mercaderes que han comercializado principalmente sus productos de paja y junco.
Foto de calle Comercio en Catacaos
Gastronomia:
La variada y agradable gastronomía que deleita el paladar de los visitantes, se degusta en sus picanterías y restaurantes que ofrecen una gran variedad de platos típicos entre los que se destacan la exquisita “Mala Rabia”; plato tradicional en tiempos de Semana Santa.
Además el cebiche, el seco de chávelo, majado de yuca, carne aliñada, sopa de novios, copus, siempre acompañados de la espumosa Chicha de Jora “Néctar de los Incas”, que es preparado a base de harina de maíz, en las tradicionales vasijas de barro.
Catacaos es famosa por su agradable y variada gastronomía que se expenden en las picanterías que son puntos obligatorios de visitantes que llegan a degustar en esta fecha la exquisita “Mala Rabia”.
La algarrobina es un producto tradicional de Catacaos extraídos de la vaina de la algarroba principal riqueza natural de Piura.
La Chicha de Jora “Néctar de los Incas” es preparado con harina de maíz, en grandes cántaros de barro, cuyo proceso dura casi una sema.